En
el vientre de su madre dialogan dos bebés:
¿Tú
crees en la vida después del parto?
Claro
que sí. Algo debe existir después del parto. Tal vez estamos aquí
porque necesitamos prepararnos para lo que
seremos
después.
¡Tonterías!
No hay vida después del parto. ¿Cómo podría ser esa vida?
No
lo sé, pero seguramente… habrá más luz que aquí. Tal vez
caminemos con nuestros pies y nos alimentemos por
la
boca.
¡Eso
es absurdo! Caminar es imposible ¿Y comer por la boca? ¡Eso es
ridículo ¡Nos alimentamos por el cordón
umbilical.
Además, la vida después del parto está excluida, es imposible. El
cordón umbilical es demasiado corto.
Sin
embargo, creo que debe haber algo. Tal vez sea un poco distinto a lo
que estamos acostumbrados a tener aquí.
Pero,
nadie ha vuelto nunca del mas allá después del parto. El parto es
el final de la vida. A fin de cuentas la vida no
es
más que una existencia angustiosa en la oscuridad, que no lleva a
nada.
Bueno,
exactamente no sé cómo será después del parto, pero seguro que
veremos a mamá y ella nos cuidará.
¿Mamá?
¿Crees en mamá? ¿Donde crees que está?
¿Dónde?
¡En todo nuestro alrededor! En ella y a través de ella es como
vivimos. Sin ella todo este mundo no existiría.
¡No
me lo creo! Nunca he visto a mamá, por tanto, lo lógico es que no
exista.
Pero,
a veces, cuando estamos en silencio, se la puede oír cantar o sentir
cómo acaricia nuestro mundo… Pienso que hay una vida real que nos
espera. Ahora, solo nos estamos preparando para ella.
Recibido
de A.A.H. 2013
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